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PRÓLOGO CHALLENGE

Acrofobia; así conocí al lector - así me desconoció el autor. Sufriendo por la peor fobia que puede sufrir un escritor: La mitología incolora de Dios. Esa, recubierta de panfletos, que a sorbos es un concepto atribuido al sufrimiento griego de escribir en el encierro del abecedario romano: La claustrofobia, la cual es inequívocamente traducida en un senado reptiliano carcomido por el braille descompuesto en la antropofobia de las alturas. Olvidando la antropología del parabrisas bailando en los pretextos de la autofobia bohemia.



En PHOBI @ MORHK, veo a Nózrag lustrando los zapatos de Hgog Nav, quien vía microondas va llegando ilustrando un retrato hablado de Bob. Es el eco de la canción Knock-knock-knockin' on limbo's door, interpretada por mi filantropía, la filantropía de Box Greek.



Maldecir mucho gusto en la mansión Greek, es cuestionarse el altruismo de ¿Quién se inventó las reglas de la filosofía ortográfica? Etnoforeleb Cortain expresó que los criterios son rumores de la banda Torofovi@x. Aunque ¿Es el prólogo el yeso del enfermo autografiado por Ayog? Verosímilmente su estuco es la veracidad de las firmas grabadas en las salpicaduras a pura sangre de rasos y esclavos, que siguen esperando su sentencia en Ximena Publish. Mientras Aremiuq Murd va degollando el lápiz labial del Rubik, en los abismos de Ossacip. Estoy hablando de los trozos de Osagep Alcet, sumergidos en los estados climáticos de sopas de letras con la temperatura de la tinta, cuyo excremento es crucificado en el lidio del manual de instrucciones del arte: La plaza de la educación eterna de La Universidad de Olimpos.



El conocimiento de Facundo Rosivelet, es la hipótesis de que nada ocurre en la calle de una ciudad con forma de desierto pero es brillante en la urbanidad de la salinidad de Oñerrac. Así es el agua en el Limbo: El insoluble brillo del celular de Teresa de Rosivelet es el luto de las mentes brillantes, el aullido de Gharatvals War en un papiro transeúnte en el cementerio de cerebros, el caudillo del laptop enterrado, y la maestría acartonada de mi madre: Pandora Greek sin graduación ni PhD.



Títulos y ceremonias aplaudidas por mi padre: Zeus Greek, mientras bebe y escupe la Aloc - Acoc en la próxima bolsa de empleo, un talego corrosivo… Las manchas del tártaro. Ese pecaminoso deseo anti rubí de Andrés Amilc que permea diversos universos, que justifican a un Crono frío de la Antártida, suplicando el perdón divino, no mezquino de aquel llanto derretido en el charco prohibido sin posesión del feudo de mi tío Poseidón Greek, declamado: PHOBI @ MORHK.



¿Qué clase de sangre será ese lugar? ¿Serán congelamientos de una tibia bodega de Skcubrats, cargada de nictofobia al no consumir la gran depresión del café? Pero si alguna vez la invitación de Gum es a dos bolsas de té, será un encuentro tinto, claro y oscuro. Un desencuentro íntimo y marítimo entre la polea de Pamela Cortain, y la logorrea de un Fobos Nretni diestro y zurdo.



Dios es el ambidiestro de las redes, corrientes y contracorrientes. La multiplicación de peces las pescó Sésiom, se las vendió a Olevaiuqam y las empeño Rebew. Por eso la comida política favorita del menú, es el paladar flotante entre salvavidas y guardacostas: La formación central. Un usufructo que a babor pedía el marinero Pep, para su barca, después del retiro del capitán Leirbag Názrat.



Las ramas de la capitanía de Morhk FC, son la manía de una línea defensiva en la selva del chimpancé, puesto que esa herramienta bipartidista no siempre es el mejor ataque en las copas lingüísticas. Ésoj reclutó la fruta prohibida de Amilliw Názrat, envuelta en las olas de más de 11 tablas de surf: La imbatible pensión azul de la afición. Por lo tanto la ciencia ficción del director de la orquesta con panorama de armonías flotantes es un pentagrama de fertilidad arbolista entre lo privado, entre lo público: El Neb Gib de Touwe. Ese titular explosivo amarillo de última hora, infértil en un verso antes y rojo un verso después. En exclusiva el Fútbol y la Política son generadores de vibraciones discursivas, al autocompletar el origen del autogol del origen: La franquicia del reloj.



En PHOBI @ MORHK, las relojerías actúan como el temblor del Tic-Tac, Tic-Tac, son el libreto crujiente del Parkinson del medio tiempo. Esa casa de empeño que nunca se detiene, pero teme inseminarse la inspiración sin cocción del Erauqs Semit. Pautando como espuma y lastimando los desamparos de Ares Retneprac en Nílbud, dejando 12 pasos en la arena húmeda, en negro y blanco, en blanco y negro. Como cuando Guelama Worrym cerró el telón de Nilpahc. Pero Rowweyet Pon siempre dejó la herida abierta del descontrol sin mute #5. Aquel perfume canalizado con las lágrimas insonorizadas de Gabriel Reltub, que cocieron la tela subversiva e inexacta del masoquismo de Semaj Reltub en más de una aguja cómica.



Las bellas tecnologías de puntas parapléjicas, fingen la comedia de las viñetas destinadas al pesar en un stand titulado: El suspenso sin Reina, sin Rey. En donde los payasos de la monarquía son lobas y lobos que con su aullido, arrugan la bolsa lunar, mientras el segundero solar es la risa que contamina las carcajadas en Omlocotse de las 50 tenebrosidades de Yarg.



Los días grises en PHOBI @ MORHK, son lobregueces geométricas de la polución popular para Paloma Ears. Es decir, una Fobia aritmética trágicamente nauseabunda, con los sentidos expuestos en alquiler y la permuta de inseguridad de las masas.



El rifle de Hamak Thy está a cargo de los guardaespaldas bipolares del fantasma de Eraepsekahs. Que resisten la vigilia purgante de las farmacias audiovisuales de Serdna Ads: La industria de falsos positivos. Ese corto circuito que Ernest Yaw, ayuda a buscar, inventar y limpiar con las heridas minerales poéticas del spray, color colorante del desamor. Un olor que Helena Esruoh difuminó mediante el ímpetu de las 50 balas del kamasutra secreto, en el tambor kamikaze de la brusquedad. Sumar una ruleta rusa y restar el disparo tallado en 100 años de soledad.


¿Dónde se consigue la vacuna para la soledad de Box? Si olvida el rifle y convive con una AK-47 por 100 meses. La cura fue la supervivencia de Los trillizos Sotalip al pozo ciego del cartucho de la Colt 45. Es por eso que la pústula del eclipse del aislamiento, no puede disparar a la ninfomanía del timbre de la dama de compañía, una venganza entre la ludopatía y antipatía que AZNALAB no pregunta cuando te va a entrevistar por primera, segunda o últimas vez: La suerte.


Y sin embargo hay que tener suerte para poder entrar en el sistema de transporte público de PHOBI @ MORHK: Morfe@ Ortem ®, que tiene un costo de 3.00 Blancas y Negras (General), y el recambio es la tarifa V.I.P de cerrar las puertas de la iglesia, sin pedir la mano. A mano alzada empatando con velas naturalmente codificadas por el óxido del anillo de Afrodita Ñxes, y siempre al servicio de la incontinencia de las capitulaciones, sin capítulos, sin hijos. El viaje desde el norte en el orinal de una vida de canciones sin dosificaciones: La Crometofobia, es disfrutar de una película en B.I.A SIN E.M.A en el barrio PENTAGRAMA, no sin antes buscar un cajero ATM del BLANCAS Y NEGRAS BANK. Para poder conservar, esperar y pagar la silla preferencial en el barrio FOLÍCULO PILOSO, un difuminado circunferencial, pulcro y sin las esquirlas del V.I.H: La Tricotilomania de FOLÍ QLATMN (Peluquería/ Barbería / Salón de belleza). Allí el degrade es la redundancia de su dueño Qlatmn, al estrenar la piromanía de un nuevo look que exige el barrio GIMNASIO. Donde según Atenas de Amilc: “Adiestrar la belleza es la vanidad de instruir el sentido común en el GYM A o en el GYM B. El primero es privado y el segundo es público proporcionalmente”.



El sudor sureño reposando con las toallas del barrio HARINA, para desintoxicar la cibofobia de la anorexia en el restaurante Griego Logi. Y si la cuenta de Ledif Ocidém es la Tripanofobia, las propinas son las heridas de la guerra psicológica mercantil en el barrio MÉDICINA, donde una ambulancia apagará el incendio en el Hospital de PHOBI @ MORHK.



Después de años y años de rehabilitación del Trastorno Bipolar maníaco depresivo, yo nací y crecí como ser, como yo, en el barrio BROQUENEX. Un territorio famoso por el Mercado Broquenex, catalogado como el mejor lugar para comprar frutas, verduras, carnes frescas, comida de mar, etc. Si camino, pero no sigo las calzadas de unas pocas cuadras, queda la estación más importante CENTRAL PARKS STATIONS, en el barrio CENTRAL P.H.R.H. A sus alrededores queda el Gobierno de PHOBI @ MORHK o la cuajada de un régimen con menos principio que final: la panela tediosa del panel parlanchín.



Hay porcentajes minimalistas y orientales en la Coulrofobia, que se escurren en el barrio MUELLE, y se excitan en el Manicomio Oimork. Ese puerto de trata de blancas y negras, ese desafío de lavado de activos, pero esa oportunidad de William Reltub para que por la pasarela de vez en cuando los vecinos del barrio AUTORIDAD, que son la Policía y el Ejército, devoren los desfiles y cabalgatas del anarquismo: La Tiemphobia.



La infeliz encrucijada de Much Key, en un laberinto del barrio EXTRANJEROS, un callejón sin salida: La Xenofobia. Aquí los visitantes soplan el calor del HUMAN MALL, en una carta baladí de la necrópolis de personas esgrimidas para el consumo gubernamental.



En el occidente la Algofobia explica el barrio EXTRATERRESTRES, un monumento al CONGRESO REPTILIANO. L@s tutoriales a las orgías dictatoriales, constituidas en logias que controlan las decisiones más importantes de la ciudad, desde los lugares más oscuros y poco visibles, pero predecibles en planetas y civilizaciones, que pertenecen a dimensiones alternativas: Las disyuntivas de SOLAPAD@S MK ULTRAZ. Esos dilemas de fortunas inoportunas que desechan la pobreza al libertinaje: La cleptomanía. Es allí en el barrio HOMELESS, en donde fue construida la Cárcel Pública Yogurt Artarus, inspirada en la divina comedia del ladrón del Averno. Almas en pena que sin pena ni gloria alguna vez se burlaron, secuestraron, torturaron, difamaron o intentaron asesinar a: OPMEIT.



Hay momentos ancestrales que en el pasado enaltecieron al barrio SOFTWARE, como un epicentro de códigos con puntos que quedaron en la coma del presente de despachos en función de la tecnología, pero el futuro es la Tanatofobia a la extinción de las historias terrícolas.


Crónicas roncas de testimonios y atentados narcisistas contra Seraz Cortain en el medio de comunicación All-Im York ®. Para difundir en el altar, el divorcio entre la salud mental en altamar. Padrin@s y Madrin@s sin teléfono fijo, con el prefijo del apetito de Remiehzla Doofs. A una velocidad crucero sin barbas y la pata de palo desnuda, por no afeitar la vena yugular. Así es el castigo de las colmenas del honoris causa a las calaveras del Central Park, la muerte.



- ¿Quién cubre los gastos fúnebres del océano? Preguntó l@ r@t@.



Box: L@s proporcionan cada capítulo en el chárter de la fotofobia de la Atlántida y el aterrizaje es más o menos fotocopi@ de un chapter ciego.



- ¿Y la certeza del pastel? Preguntó l@ r@t@.



Box: Me niego a las preguntas, pero no reniego a las respuestas.



- ¿Y las rimas? Preguntó l@ rat@.



Box: ¡En la caja blanco y negra!



- ¡Esa es la malévola envoltura de la Marcha del Gel! Afirmó l@ r@t@.



Box: ¡No! ¡Es la suave maldición del 2020 con o sin los Millennials!



- ¡Sin la saliva tan sol @ pudiera ver! Exclamó l@ r@t@.



- ¿Quién revela los genocidios de PHOBI @ MORHK? Por ejemplo los asesinatos de la mansión Greek? Preguntó l@ rat@.



Box: ¿Pregúntale a l@s c@r@ de v@c@s?



- ¿Y si después de la Marcha del Gel, l@s Satsixat y Srebu solo hablan en inglés? Preguntó l@ r@t@.



Box: Cheese Odiouc…


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